Salmo 30 - Su ira dura solo un instante, ¡pero su favor perdura toda una vida!

El rey David compuso esta alabanza, para cuando se dedicara el Templo. Es decir, él escribió una alabanza para el futuro, ya que el Templo fue construido por su hijo Salomón. Sabemos que David tenía el anhelo de construir este Templo, pero Dios no se lo permitió, por haber derramado mucha sangre. Así fue como David empezó a hacer todos los preparativos para la construcción: juntó todos los materiales, etc; y hasta compuso las alabanzas que serían cantadas durante la dedicación del Templo. Y aquí encontramos un mensaje muy importante para nuestras vidas, ya que David nos habla de su experiencia: He tenido momentos difíciles; he pecado y he recibido el castigo por mis pecados. He experimentado la ira de Dios. Pero también he experimentado su perdón. Y su ira, solo tiene un propósito: que yo me arrepienta. Que yo me de cuenta cuando a veces me desvío del camino, y me estoy apartando del Señor. Cuando me estoy apartando del Señor, entonces Él también se aparta de mi, para que yo me de cuenta que todo se lo debo a Él. Si no fuera por su gracia y por sus misericordiosas bendiciones, no seríamos nada. David siempre fue un guerrero valiente y esforzado. Pero sus victorias militares provenían del Señor. David reconoce que Dios tiene el poder de cambiar nuestra tristeza en alegría; nuestro luto en danza. Si estás experimentando momentos de tristeza, y has pasado una noche llena de llanto, recuerda que por la mañana llegara la alegría. Que el Señor te bendiga.