Salmo 139 - Te alabaré, porque asombrosa y maravillosamente he sido hecho

David, por inspiración divina, reflexiona sobre los atributos de Dios, los cuales son razones por las cuales alabarlo. ¿Cómo no alabar a Dios, si es supremo en todos los sentidos? David comienza alabando a Dios por su omnisapiencia - Dios todo lo sabe. Dios conoce todos nuestros pensamientos. Él sabe lo que vamos a decir...incluso antes de que lo digamos. Dios conoce perfectamente el futuro - sabe exactamente cuáles son las decisiones que cada uno de nosotros tomará. Dios también es omnipresente - Dios está en todas partes, lo cual implica que no se puede huir de su presencia. Incluso en la oscuridad, en las tinieblas, en los lugares más inhóspitos, allí también encontraremos a Dios. Y David estuvo en lugares así. Por un tiempo, mientras huía de Saúl, David se refugió entre los filisteos...paganos. Pero David se dio cuenta que Dios estaba con él, incluso en los lugares más tenebrosos. Incluso cuando David pecó horriblemente con Betsabé, él se dio cuenta de que Dios no lo soltaba. Dios vive en luz inaccesible; pero también nos busca cuando descendemos a las más oscuras tinieblas. Dios nos formó en el vientre de nuestras madres. Dios conoce todo acerca de nosotros. Y aún así, Dios nos ama. ¿No crees que Dios es maravilloso? ¿No crees que estas son razones suficientes para siempre alabarlo? Alabado sea el Señor por su gran poder y por su gran amor y misericordia. Que el Señor te bendiga.